Ya está aquí la tarta de celebración por la entrada nº 100!!
Perdonadme pero sigo con problemas de "logística" con las fotos!! Como habréis podido adivinar por el título de la entrada, la tarta que os traígo hoy fue un pequeño homenaje casero al pasado 4 de Julio (Rubén!! perdóname, se me pasó: Felicidades!!!), día nacional de los USA. A pesar de que tendrán muchas cosas que no nos gustarán, también hay que reconocer que tienen muchas otras muy buenas, entre ellas sus postres, que son fabulosos! Ya sabéis que allí todo lo hacen "a lo grande" y con las tartas no van a ser menos. Y para tan citado acontecimiento, aprovechando que tenía unos invitados muy especiales a comer a casa, se me ocurrió preparar algo típico de allí. Cuántas veces no habremos visto en las películas al protagonista pedir en una cafetería una porción de tarta de manzana! Nunca os habéis preguntado cómo sabrá?? Pues aquí tenéis la respuesta!!
American Apple Pie
Ingredientes:
1 paquete de masa quebrada
6 manzanas grandes
1 cucharada de zumo de limón fresco
1/2 cucharadita de ralladura de limón
120 ml de azúcar moreno
1 cucharadita de canela
1/4 cucharadita de nuez moscada
1/8 cucharadita de clavo
1/8 cucharadita de jengibre en polvo
1 cucharada de harina
1 cucharada de mantequilla - en trocitos
1 cucharadita de azúcar
Un pellizco de canela
1 cucharada de leche
Preparación:
Os he copiado los ingredientes originales de la receta, aunque yo suprimí algunos que no suele haber por mi casa: el clavo y el jengibre. La masa quebrada la sustituí también por hojaldre, que fue lo que más parecido me resultó de entre las ociones que había en el supermercado. A juzgar por el resultado, creo que se parecía bastante! La próxima vez intentaré hacerla yo misma, para esta receta necesitaréis dos paquetes: uno para la base y otro para la cobertura.
Empezamos: lo primero es preparar las manzanas, para lo que hay que pelarlas, quitarles el corazón y partirlas en rodajas finas. En esta ocasión, no importa que no queden iguales porque no se van a ver. Las ponemos en un cuenco con el zumo y la ralladura de limón, para que no se oxiden, y les añadimos la mezcla que habremos realizado con el azúcar, la harina y las especias. Se deja reposar para que se impregnen bien de la mezcla.
Mientras tanto, precalentamos el horno y preparamos la masa: la extendemos en redondo y cubrimos la base del molde, previamente enharinado (de unos 22 cm y mejor si es profundo!) con ella, dejando los bordes fuera para luego utilizarlos para cerrar la tarta. Rellenamos con las manzanas, añadiendo sobre ellas unas cucharaditas de mantequilla, al gusto, y tapamos con la otra masa, cerrando bien los bordes. Para la tapa, podéis poner la masa directamente, haciendo unos agujeros para que entre el calor al interior, o cortar la masa en tiras como hice yo. En otra web encontré una opción "más patriótica", cortándola con moldes de galleta en forma de estrella. Cualquiera es buena siempre que tenga los agujeritos. Utilizamos ahora la cucharada de leche para pintar el pastel y le espolvoreamos un poco de azúcar y canela.
Por último, lo más importante: el horno! Según decía la receta: "Hornear durante 10 minutos a 230º. Reducir la temperatura a 190º y hornear otros 20-30 minutos más". Mi experiencia: cada uno conoce su horno mejor que nadie. En mi caso, no sólo tengo problemas con las fotos, el horno quema demasiado al fondo, sobre todo cuando las temperaturas son muy altas. Si es vuestro caso y no tenéis prisa, es mejor que se tome su tiempo!!
Tampoco tengáis prisa para comerlo, es mejor esperar a que se enfríe del todo porque si lo partís en caliente se desmontará. Lo ideal sería comerlo al día siguiente, calentándolo un poco en el microndas. Con un poco de caramelo y nata o helado ya sería perfecto! Ummmm, se me hace la boca agua de imaginarlo, estaba riquísimo!!
Ps. Este es un blog con alto contendido para niños, así que no voy a explicar qué es el agujero de este pastel, cada cual que se imagine lo que quiera, o que vea la película!
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